Los mandalas son unos dibujos en formas concéntricas utilizados desde tiempos ancestrales para conseguir una armonía personal. Son un soporte gráfico para llegar a la meditación, tanto al observarlos como al dibujarlos o pintarlos. Son originarios de la India, pero se han encontrado otras representaciones geométricas simbólicas en otras culturas como la de los indígenas de América o de los aborígenes de Australia. Mandala es una palabra sánscrita que significa círculo. Los monjes budistas construyen complicados mandalas para conmemorar situaciones especiales, empleando incluso semanas en construirlos a base de arenilal tintada y cuando los terminan los dejan al viento para que los deshaga. Con esta idea nace esta serie fotográfica, donde formas escogidas se muestran como madalas, representan el mapa del cosmos, una pequeña muestra totalizadora de la proyección geométrica del mundo. Las fotografias, como los mandalas son una respuesta instantánea cuyo propósito consiste en entender intuitivamente las posibilidades infinitas del subsconsciente humana. Son mapas que revelan un camino sutil hacia nuestro propio centro, el punto a partir del cual se desarrolla nuestro propio universo.